Gorillaz ha sido uno de los productos más ambiciosos en todo sentido durante los últimos veinte años, desde su surgimiento se lograron ganar una leal y sólida legión de fans que estaban encantados con el concepto virtual y desde el 2001 2-D, Murdoc Niccals, Noodle y Russel Hobbs se han convertido en una institución de la música alternativa y de la cultura pop.
Si bien la idea de una banda virtual ya existía, hasta Gorillaz no se había explotado como se debía, fue así como la unión de dos pesos pesados del arte se creó Gorillaz, pesos pesados como Damon Albarn front man del gigante del Britpop, Blur, quien cabe mencionar por esas fechas se encontraba deseoso de explorar nuevas fronteras musicales más allá de su banda principal, y Jamie Hewlett quien para finales de los noventa ya era una institución en el arte gracias a sus cómics de Tank Girl. Por toda una década Albarn y compañía maravillaron al mundo con sus hits como Clint Eastwood, Feel Good Inc, El Mañana, Stylo, On Melancholly Hill, etc, pero en el 2010 a raíz de rencillas personales el grupo se separó e incluso llegó a pensarse que jamás regresaría, sin embargo seis años después Albarn y Hewlett regresaron a trabajar juntos y el resultado fue Humanz, el disco con el que Gorillaz regresaría.
A través de material documental no liberado al público somos testigos del proceso de grabación de su nuevo disco y la vida de la banda durante el Humanz World Tour, dándonos una probada de primera mano al proceso creativo de Albarn y Hewlett.
Cuando la banda anunció este documental me emocioné demasiado, sobre todo porque durante mucho tiempo se estuvo rumorando que se estaba trabajando en una serie producida por Netflix de la banda y una película. A pesar de no haber podido ir a verla al cine debido a que las funciones eran demasiado tarde y por solo una noche logré ver el documental a través del canal de Youtube de la banda, sin embargo el resultado no fue lo que esperaba. El trabajo recopilatorio de Denholm Hewlett, hijo de Jamie Hewlett es excepcional, sin embargo cómo fan de hueso colorado de la banda me deja con un sentimiento amargo.
No es posible no comparar a este documental con el anterior documental de la banda: Bananaz, porque este documental fue el primero que nos dió un vistazo honesto al proceso de creación de la banda y como fue su surgimiento, es por esto que cuando se anunció Reject False Icons esperaba algo similar.
Desafortunadamente el resultado final es completamente diferente a lo esperado, ya que si bien efectivamente podemos ver como se grabaron y produjeron todas las canciones del disco hace falta una idea principal, ya que el documental se siente demasiado plano o seco debido a que no vemos ninguna declaración ni entrevista de parte de los miembros del equipo. Si bien podemos ver como conviven y cuál es su dinámica de trabajo se siente más como si estuviéramos viendo un detrás de cámaras o un reality show.
De nuevo, el trabajo del Hewlett no es para nada malo, pero se nota a leguas que se enfocó mucho más en lo visual y la fotografía que en la narración, y esto no es para más debido a que es la profesión o a lo que éste se dedica. Pero a pesar de que sea válido darle más relevancia a un elemento que a otro, esta decisión como mencioné deja algo hueco al documental, haciéndonos sentir raro o no saber qué es lo que estamos viendo.
Otra inconsistencia que encuentro en este documental es la razón de ser del título Reject False Icons. Además del concepto de banda virtual, la protesta y la denuncia ha sido uno de los elementos principales de Gorillaz y prueba de ello es el video de su canción Rock It
donde se hace una denuncia acerca de las figuras públicas que se hacen pasar por iconos sagrados ante la población, por lo que uno pensaría que al llevar el documental el título se le daría cierta relevancia a ese concepto, sin embargo esto no sucede a lo largo del documental quitándole bastante sustento al título elegido.
A pesar de lo anterior resulta bastante interesante observar cuál es la relación que los miembros de la banda en vivo sostienen, además de ver a Damon grabar las canciones del disco con todos los invitados que cabe mencionar son tanto veteranos de la industria como jóvenes talentos que apenas van labrando su camino en el mundo musical, lo cual ha caracterizado a la banda en los últimos años.
Este documental resulta bastante interesante tomando en cuenta que cuando salió no teníamos idea de cuando volveríamos a ver a la banda, además de que su larga ausencia generó que cualquier material que sacaran sería bienvenido. Desafortunadamente el darle prioridad a lo visual ante lo narrativo da como resultado un producto un tanto extraño que ni a los fans más acérrimos de la banda les termina dejando satisfechos.
7/10
Comments